Existen infinidad de historias que ubican al ambiente del fútbol entre los más supersticiosos y cabuleros del planeta. De hecho, quizás sea el único mundo en el que los mejores y más capacitados creen depender de algún rito específico para asegurar su brillo en el campo de juego.
Pues bien… para aquellos que crean en este tipo de cuestiones, la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 tiene todo para convertirse en la tercera consagración histórica de la selección argentina. O al menos eso dicen infinidad de coincidencias que van desde la maldición de los 24 años, los Premios Oscar de la Academia y el mundo del tenis. ¿No nos crees? Lee y sorpréndete con nosotros.
Sufrimiento y maldiciones
Para empezar a desandar un número llamativo de coincidencias entre 1986 y 2010, tenemos que abordar la etapa clasificatoria. Argentina sufrió hasta el último partido para obtener su pasaje rumbo a México en 1985, y lo consiguió con un gol sufrido en los minutos finales ante Perú. El autor del agónico tanto en el Estadio Monumental fue Ricardo Gareca, un delantero alto, rubio y del fútbol local. Cualquier semejanza con el tanto de Martín Palermo bajo el diluvio de 2009 es pura coincidencia… ¿o no?
